DEMANDA

Variación y componentes

Información elaborada con datos provisionales a enero del 2023
Demanda
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Comparado con la evolución de la actividad económica, la demanda eléctrica y el PIB han mostrado una variación de signo contrario, como ya pasó en el año 2019 y 2014. EN

Comparado con la evolución de la actividad económica, la demanda eléctrica y el PIB han mostrado una variación de signo contrario. El PIB ha mantenido una variación similar a la del pasado año, mientras que la demanda vuelve a registrar valores negativos, como ya pasó en 2019. La evolución divergente entre la demanda y la actividad económica ha dado lugar a una elasticidad negativa del 0,5 entre la variación de la demanda corregida y el PIB, situación que no se producía desde el año 2019 y anteriormente, desde el año 2014.

En cualquier caso, la evolución de la elasticidad entre la demanda eléctrica y el PIB mantiene una tasa de relación baja, tal y como viene mostrando en los últimos años: elasticidad de 0,1 en el período 2017-2021 y de -0,1 en el periodo 2018-2022. Es decir, en los últimos años se aprecia una práctica ausencia de relación entre estas variables, tal y como se viene poniendo de manifiesto tras la recuperación económica que se produjo tras la crisis de 2009.

Evolución anual de la variación de la demanda b.c.

PIB: Fuente: INE, CEPREDE (previsión Baleares y Canarias 2022).

El año 2022 ha sido menos frio en invierno y más caluroso en verano que el año 2021, lo que resulta una aportación positiva de las temperaturas de 0,7 puntos porcentuales al crecimiento de la demanda.

Una vez corregida la influencia de la laboralidad y de las temperaturas, resulta una variación negativa respecto al año anterior del 3,3 % en España, en península la variación ha sido del -3,9 %, ambos valores inferiores a los registrados el año 2019, aunque menos acusados que los registrados el año de la pandemia.

Evolución anual de los componentes de la variación de la demanda eléctrica

% Variación año anterior

Evolución mensual de los componentes de la variación de la demanda eléctrica

El año 2022 es el más caluroso de la historia

Desde el punto de vista de la influencia de las temperaturas sobre la demanda, el conjunto del año 2022 comparado con la media histórica, muestra temperaturas más calurosas en verano y más suaves en invierno. A nivel peninsular, los grados día con efecto frío han sido menores en un 21,2 % a los valores medios y los grados día con efecto calor han sido superiores en un 72,9 % a los valores medios del período considerado. Es decir, en el conjunto del año, el número de días con temperaturas más cálidas que la media ha sido superior.

De esta manera, a lo largo del año 2022 en un 62,6 % de los días se registraron temperaturas muy superiores a la temperatura media histórica. Estos días se concentran sobre todo de mayo a agosto y de octubre a diciembre, destacando el mes de julio entre los meses de verano, y octubre entre los de invierno. En el lado contrario, días con temperaturas inferiores a la media histórica, en tan sólo el 5,5 % de los días del año se produjo esta situación, concentrándose estos días, principalmente, en marzo y abril.

Al comparar con el año anterior, el año 2022 ha sido menos frío en invierno y más caluroso en verano que el año 2021, con un 15,8 % de grados día de frío menos y un 49,8 % de grados día de calor más. Del impacto combinado de estos efectos, resulta una aportación positiva de las temperaturas de 0,8 puntos porcentuales al crecimiento de la demanda.

Evolución mensual de las temperaturas máximas

Media histórica: Media de temperaturas máximas diarias en el período 1989-2013.

Evolución de las temperaturas máximas diarias comparado con la media histórica

Media de temperaturas máximas diarias en el período 1989-2013.
Fuente: AEMET y elaboración propia.

Aunque el año comenzó con un descenso de la demanda condicionado por la sexta ola de la variante ómicron, parecía que la tendencia era de recuperación, a pesar de las alteraciones en la cadena de suministro y el encarecimiento que se estaba produciendo en las materias primas por las tensiones geopolíticas, pero la invasión de Ucrania constituye una fuerte perturbación, que tensa aún más el mercado de las materias primas y hace que la demanda se estanque en variaciones negativas hasta junio, en que el incremento del turismo internacional relaja este descenso, a valores inferiores al 1 %. Pero a partir de agosto, la fuerte inflación y las medidas de ahorro adoptadas han llevado a la demanda a una tendencia claramente bajista, que parece que no tiene signos de recuperarse mientras que continúe la guerra en Ucrania.

Variación mensual de la demanda corregida en 2022

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